Espaciodespacio

El pasado lunes día 12, tuvo lugar un nuevo e intenso espaciodespacio, donde compartimos la alegría del resucitado. 

La Pascua está hecha para el disfrute, el derroche, la generosidad extrema. Pasraon los días de ayuno y de penitencia para concentrarnos en la alegría. Una alegría no eufórica que acaba en instantes: la alegría que propone la cultura actual. Sino esa alegría qu se prende del alma y no hay quein nos la arrebate. La alegría del saberse amados. La alegría de tener  un Dios que hace maravillas en nosotros. La alegría que no depende ya de nosotros, de nuestros fracasos o peripecias. La alegría que nadie nos puede robar porque es definitivamente divina. Estamos hechos para la alegría. Y la Pascua está diseñada para celebrarlo. Alégrate y goza de tu Dios.

Durante la oración tuvieron, como siempre, tres espacios distintos. El espacio de la palabra, en el que cantaron y recitaron juntos el salmo 61 (El Señor es mi luz y mi salvación) y compartieron la Palabra de Dios. Tras este espacio, tuvieron un pequeño espacio de la escucha, donde distintas personas recitaron el pregón pascual con la capilla a oscuras, tan sólo iluminada por el cirio Pascual, el cuál iluminó a todas las personas que allí estaban a través de unas velas que iban encendiendo las personas que recitaron el pregón y las iban entregando a los presentes. Y por último el espacio de compartir, en el que cada uno, con la vela en sus manos, llenaron de luz y resurrección el interior de sí mismos. Después de estos "espacios" compartieron en gran grupo las experiencias que había tenido cada uno en Pascua.
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