
-Yo, desde mis majestuosas cumbres tengo al mundo a mis pies, contemplo los mas bellos amaneceres y los mas esplendorosos crepusculos; la luz de la luna acaricia mi cuerpo y me siento parte de las estrellas porque casi puedo tocarlas. Es tan grande mi presencia que casi puedo sentir que toco a DIOS... Y tu, insignificante abismo... ¿Que haces alla abajo?
Y el abismo le contesto:
-YO SOY QUIEN TE SOSTIENE.
Sin la existencia de la piedra más pequeña, no se formaría la playa. Sin la existencia de un hilo, una alfombra no tendria tanta belleza.Y sin la existencia de la gota de agua, el océano no tendría su inmensidad. Toda la existencia y todos los seres somos indispensables y nadie está por encima de nadie.
NR