Llegados a este tiempo todo invita a recoger. Los campos ya están a punto, los escolares excitados con la inminencia del juicio a su esfuerzo. Y nosotros os proponemos también eso: recogernos. O sea, recoger todo nuestro ser, el que normalmente llevamos encima y somos conscientes, y también las migajas de existencia que vamos dejando por el camino.
Recogernos para adentrarnos en el silencio y ahondar en la seguridad de que somos amados. Solo de esta experiencia del amor podemos reencontrarnos y aseguranos de que es nuestra la vida que vivimos y no otra.
Recogernos para adentrarnos en el silencio y ahondar en la seguridad de que somos amados. Solo de esta experiencia del amor podemos reencontrarnos y aseguranos de que es nuestra la vida que vivimos y no otra.
Antes del sopor del estío y de la invitación que nos hace la naturaleza a la extroversión y al descanso, asegúrate de que estás todo entero, no sea que al verano lleves de ti solamente tus despojos. Ven hermano, hermana, compartamos nuestro silencio y después, ¡partamos, que a Dios se le encuentra en cualquier viento.
Os esperamos para despedir el curso, como siempre a las 19:00 horas, en la capilla del Fray Luis. Traed alguna cosita para compartir después en plan merienda. Los frailes pondremos las bebidas.
