Durante un fin de semana pudieron compartir experiencias, vivencias y oraciones en un clima de alegría y comunidad. Dentro del tiempo de reflexión, ahondaron en el tema de este año "Quiero darme más" donde a través de trozos de película y una dinámica chocante que les provocaba a dar la vuelta y a romper con todas las cosas que no nos gustan en la vida, compartieron por parejas un camino de Emaús donde recibieron provocaciones y ayudas a lo largo del camino para poder reflexionar. Quizás fue el momento más fuerte de la convivencia donde salieron a la luz muchos de los sentimientos que se habían estado enraizando durante esos días.
También tuvieron tiempo para conocer el pueblo de Altea, hacer "piña" cocinando juntos, celebrar la Eucaristía y sobre todo para compartir y darse mucho más.