La iglesia del Crucifijo de Puente la Reina acogió el pasado viernes 3 de septiembre a los jóvenes voluntarios navarros que acompañan la Cruz y el Icono de la Virgen María de las Jornadas Mundiales de la Juventud. Nuestra iglesia fue la primera parada de la jornada de ese día, y numerosos fieles puentesinos se habían congregado desde primeras horas de la mañana para recibir a estos jóvenes y la Cruz y para participar en la oración litúrgica preparada.
Alrededor de las 10,45 hh, la cruz procesional de la parroquía se saludaba debajo del arco del Crucifijo con la Cruz de los jóvenes. Ya dentro, mientras los congregados entonaban el tradicional "Victoria,tú reinarás", se incesaba la Cruz y el Icono de María. Los jóvenes voluntarios ocuparon el presbiterio, bajo el Crucifijo gótico de nuestra iglesia, mientras varios jóvenes de Puente sostenían la Cruz. El acto litúrgico tuvo su momento central en la lectura de un texto de la Carta de San Pablo a los Filipenses (Flp 2, 6-11), en la que se resalta la entrega generosa de Jesús, su abajamiento y el valor redentor de su muerte en cruz.
Tras un momento de reflexión y adoración de la Cruz, se hizo la oración final y se convocó a todos a venerar la cruz en la iglesia parroquial de Santiago, puesto que esa sería la siguiente parada en nuestro pueblo. Los fieles, en procesión acompañaron hasta el templo parroquial a la Cruz y el Icono que portaban jóvenes de Puente la Reina, allí tendría lugar, coincidiendo con esta feliz visita, la celebración sacramental de la Unción de los enfermos.
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Tras un momento de reflexión y adoración de la Cruz, se hizo la oración final y se convocó a todos a venerar la cruz en la iglesia parroquial de Santiago, puesto que esa sería la siguiente parada en nuestro pueblo. Los fieles, en procesión acompañaron hasta el templo parroquial a la Cruz y el Icono que portaban jóvenes de Puente la Reina, allí tendría lugar, coincidiendo con esta feliz visita, la celebración sacramental de la Unción de los enfermos.
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Deseamos que este recorrido de la Cruz peregrina de los jóvenes sea un momento intenso de renovación de la fe y de conversión, para vivir mejor nuestra vida cristiana, y para preparar gozosamente el encuentro de Madrid que tendrá lugar en agosto de 2011.
