Cine: Amélie

Amelie (Audrey Tautou) es una persona que se ha creado su propia vida. Nacida en un entorno hostil a la felicidad, ha suplido faltas de cariño y de abundancia con una imaginación desbordante que convierte su existencia en una fábula, de encuentros y desencuentros, en la que ella se asigna el papel del hada buena, la que facilita las vidas de los demás con un toque de varita mágica. Pero un hada humana al fin y al cabo que se dará cuenta de que también ella necesita de sus poderes.

Amélie es una película dulce, un cuento que nos hace disfrutar ante la pantalla. Sin duda, esta película hechiza el corazón del espectador por un montón de razones, entre las que destacamos la propuesta de una manera de vivir y de servir.

“Amélie” es un juego alegórico sobre las necesidades afectivas y sociales de unos seres marginales y marginados, quizá por su condición o por su condición de querer ser diferentes. Sin duda, el querer ayudar y servir a los demás a través de los pequeños detalles de la vida, la opción por los pobres (los “raros”, los marginados de la sociedad), la necesidad de afecto y de salir de sí mismo, dejarse ayudar… están muy presentes a lo largo dela película.